Nota: Esta nota fue publicada originalmente en enero de 2018 como acompañamiento para el episodio «El área gris». Un año después, la actualizamos para acompañar también al episodio «Los Pibes».

---

 

Por: Luis Fernando Vargas – Editor en Radio Ambulante.

Como acompañamiento a estos dos episodios sobre salud mental pensé que tal vez sería útil hacer una selección de recursos que pueden ayudar en los momentos difíciles. No es para nada una lista comprensiva, sino una pequeña muestra de sitios, lecturas y podcasts a los que he recurrido cuando he estado en puntos muy bajos, y que, de una forma u otra, me han mantenido a flote. Son recursos a los que he acudido en las noches en que uno termina ahogado en pensamientos negativos, cuando se siente completamente solo. No son un sustituto de terapia o tratamiento médico, pero ojalá también puedan ayudar a alguien más.

Lamentablemente algunos de los enlaces solo están en inglés. Me gustaría encontrar contenidos así en español, hechos por latinoamericanos. Si conocen alguno, por favor compártanlo en los comentarios al final.

Sitios web

Me siento un poco extraño recomendando estos sitios. Asumo que soy huraño y no me gusta el estilo “carta abierta”. Pero lo cierto es que necesitamos hablar. Y estas páginas son una plataforma para que cientos de voces lleguen a alguien. He pasado horas leyendo testimonios, dándome cuenta de que no estoy solo en esto.

The Mighty. Una comunidad de personas compartiendo sus historias.

To Write Love On Her Arms. Es una organización sin fines de lucro que trabaja informando sobre la salud mental y ayudando a personas luchando contra depresión, adicciones, lesiones autoinflingidas y pensamientos suicidas. Su blog es similar al the The Mighty, y se pueden encontrar diversos testimonios.  

Aquí hay dos manuales prácticos en español creados por la National Alliance on Mental Illness y el Suicide Prevention Resource Center de Estados Unidos. El primero instruye sobre cómo cuidar la salud mental después de un intento de suicidio fallido, y el segundo está dirigido a familiares de personas que han intentado suicidarse.  

Podcast

Hay uno que tengo en la mente en estos últimos días: “Terrible, Thanks for Asking”, creado por Nora McInerny. Son historias sobre cómo sufrimos, cómo vivimos sintiéndonos alienados, y, en especial, sobre cómo experimentamos nuestra humanidad en los momentos más oscuros.

Libros

Leer sobre las enfermedades mentales y conocer las experiencias de otras personas ha sido fundamental para comprender mi situación, para poner en palabras todas esas cosas que socialmente se mantienen en silencio.  

Moda negra. Duelo, melancolía y depresión (2011). Darian Leader. Sexto Piso. Actualmente la depresión está en todos lados. Parece un término omnipresente. Es usado en casos tan variados que la palabra ha ido perdiendo su significado y por tanto, su utilidad al momento del diagnóstico y tratamiento. Leader, un psicoanalista inglés, rescata dos conceptos que hace 50 años eran fundamentales en la práctica de la psicología, “duelo” y “melancolía”. A partir de ahí explora la forma en que tener estas palabras presentes cuando hablamos de enfermedades mentales nos puede ayudar a entenderlas y tratarlas mejor. También hace una reflexión sobre este “olvido semántico” y lo que dice de nuestra cultura, y cómo los términos “duelo” y “melancolía” han seguido vivos y evolucionando a través del arte.

Sol Negro. Depresión y Melancolía (2017). Julia Kristeva. Wunderkammer. Este es un libro es un clásico de la literatura psicoanalítica. Acaba de salir la edición del 30 aniversario en español, y explora de forma hermosa el origen de ese sol negro que llamamos depresión. Además analiza cómo estos sentimientos se han expresado en tres grandes escritores: Gérard de Nerval, Fiódor Dostoyevski y Marguerite Duras. Hay algo reconfortante en ver todas esas cosas que uno siente expresadas en palabras, racionalizadas. Su lectura es un proceso de abrir las heridas para cuestionarlas y elucidarlas. Advertencia: contiene mucho “mumbo-jumbo” psicoanalítico, pero aún así es una lectura comprensible y enriquecedora.

El demonio de la depresión (2015). Un atlas de la enfermedad. Andrew Solomon. Debate. Mitad memoria personal, mitad enciclopedia, Andrew Solomon hace un recorrido por la depresión en todas sus dimensiones: desde la vivencia personal, los tipos de tratamientos y medicamentos, la manera en que ha abordado socialmente durante la historia y las políticas que hay para lidiar con ella. Es un libro enorme, pero muy claro.

La ciudad solitaria. Aventuras en el arte de estar solo (2017). Olivia Laing. Capitan Swing. Otro libro que es una mezcla, esta vez entre memoria y crítica cultural. La autora parte de su experiencia viviendo en Nueva York para reflexionar acerca de la manera en que las ciudades propician el sentimiento de soledad. Además, por medio de las obras de artistas como Edward Hopper y Andy Warhol, Laing explora qué significa estar solo, por qué nos sentimos así, y también cómo podemos resistir y encontrar la belleza en eso que tanto tememos. Advertencia: No he terminado el libro, pero lo estoy disfrutando mucho.Si todo se cae al final, hago una actualización.

Apuntes sobre el suicidio (2016). Simon Critchley. Alpha Decay. Una reflexión sobre el suicidio a través de los pensamientos de escritores y filósofos. El punto está aquí: “El tema del suicidio hace que nos planteemos inmediatamente la siguiente pregunta: ¿en qué nos basamos para juzgar si una vida ha sido valiosa o no? Podría parecer que si no somos capaces de dar respuesta a la pregunta acerca del sentido de la vida, lo más prudente, o quizá incluso necesario, sería entonces salir de ella en busca de… lo que sea: Dios o el vacío o alguna mezcla de ambos. Si no encontramos razones para ser, entonces quizá sea mejor no ser. Pero eso sería un terrible error, un funesto paso en falso. La pregunta acerca del sentido de la vida es errónea y lo más adecuado sería obviarla. Nunca recibiremos la gran revelación. (…) En vez de ello, tomando una vez más el ejemplo de [Virginia] Woolf, hay pequeños milagros cotidianos, fósforos que se encienden en la oscuridad, las olas que rompen sobre la playa y la señora Ramsay diciendo: ¡Vida, detente aquí!” (p.88).

Instrumental (2015). James Rhodes. Blackie Books. Una memoria del famoso concertista de piano, y, para muchos, “renovador de la música
clásica” —por lo menos ha tratado de hacerla más accesible al público, de eso no hay duda—. La vida de Rhodes es una vida de tragedias: “Me violaron a los seis años. Me internaron en un psiquiátrico. Fui drogadicto y alcohólico. Me intenté suicidar cinco veces. Perdí la custodia de mi hijo. Pero no voy a hablar de eso. Voy a hablar de música. Porque Bach me salvó la vida. Y yo amo la vida”. Un libro sobre cómo encontrar la salvación.    

Bonus track

¡Un disco! “A Crow Looked at Me”, de Mount Eerie. La música Geneviève Castrée, esposa de Phil Elverum —la persona detrás de Mount Eerie—, murió de cáncer cuando su hija tenía 4 meses. Phil escribió y grabó el disco en su casa tan solo 2 meses después de su pérdida, como una manera de lidiar con sus emociones. Las canciones suenan a nostalgia, enojo, melancolía y duelo. Llevan a un lugar oscuro, en el que muchos hemos estado.

Líneas de atención

Si estás deprimido y tienes pensamientos suicidas acude a una línea de atención telefónica en tu país. Aquí algunos números y datos que pueden servir.

• Estados Unidos (Español):  +1-888-628-9454
• Argentina: +5402234930430

Teléfono de la esperanza. Es una ONG que trabaja en diferentes países de Latinoamérica (Honduras, Costa Rica, Colombia, Venezuela y Perú) y que promueve la salud mental, en especial en personas en situaciones críticas. En la página podés encontrar recursos en línea y la página web y número telefónico de la oficina de cada país. telefonodelaesperanza.org